El níquel es un elemento metálico natural con un aspecto blanco plateado y brillante. Es el 24.º elemento más común en la Tierra y se presenta ampliamente distribuido en las rocas de la corteza y en el núcleo de nuestro planeta.
El níquel es un metal que tiene una presencia ubicua en la superficie terrestre: se encuentra en trazas por todas partes y es necesario para las funciones biológicas del organismo humano. El níquel se absorbe a través de los alimentos, en particular los vegetales, que contienen un porcentaje más o menos elevado según el tipo y la zona de cultivo.
Como muchas otras sustancias, las autoridades también han definido para el níquel un límite de seguridad de ingesta a través de alimentos y agua.
Se puede encontrar más información sobre los riesgos de la ingesta de níquel por vía oral en la EFSA, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria. Dicha institución actualizó el 24 de septiembre de 2020 el documento de evaluación del riesgo del níquel en los alimentos y el agua potable. El documento se puede encontrar en la siguiente página: Update of the risk assessment of nickel in food and drinking water .
Normativa MOCA: el uso de los recubrimientos de niquelado químico en contacto con alimentos
El uso de los materiales en contacto con alimentos está regulado por el Reglamento MOCA (CE) n.º 1935/2004 que, en su artículo 3, especifica:
Los materiales y objetos, incluidos los materiales y objetos activos e inteligentes, deben producirse de conformidad con las buenas prácticas de fabricación para que, en condiciones normales o previsibles de uso, no transfieran a los productos alimenticios componentes en cantidades tales que: a) constituyan un peligro para la salud humana; b) supongan una modificación inaceptable de la composición de los productos alimenticios; o c) supongan un deterioro de sus características organolépticas.
Hablando específicamente del niquelado químico, se utiliza a menudo como alternativa al acero inoxidable en piezas de maquinaria para el procesamiento de alimentos, sobre una base de acero, aluminio y latón.
Las causas por las que un material puede liberar sustancias a un alimento son principalmente dos:
- Cesión química: transferencia de sustancia del objeto al alimento debido a la agresión química del material.
- Desgaste mecánico: transferencia de sustancia del objeto al alimento debido a fenómenos de desgaste y eliminación mecánica.
Cesión química
El recubrimiento de niquelado químico, especialmente el tipo de alto contenido en fósforo Niplate 500, presenta una alta resistencia química en contacto con muchas sustancias. El recubrimiento generalmente no se degrada por alimentos secos, sustancias oleosas o grasas ni en presencia de soluciones acuosas neutras.
Por otro lado, el recubrimiento de níquel químico puede transferir iones de Ni2+ al alimento en función de diversas condiciones, por ejemplo:
- tipo de alimento;
- estado físico del alimento: sólido, líquido, aceitoso, graso;
- presencia de sales;
- pH neutro, alcalino o ácido;
- temperatura;
- tiempo de contacto.
Si hablamos, por ejemplo, de las máquinas de café, un accesorio niquelado no cederá níquel como una caldera, ya que para dicho accesorio la superficie de contacto es escasa y el tiempo de contacto breve, mientras que el agua hirviendo puede permanecer días en la caldera y, si esta es niquelada, puede producirse la migración del níquel en cantidades inaceptables.
El níquel químico, como todos los metales en general, es sensible a las sustancias ácidas, y en particular a las sustancias ácidas oxidantes, aunque su capacidad para resistir la corrosión y la consiguiente disolución es superior a la del niquelado galvánico y a la de muchos otros metales.
Desgaste mecánico
La capa de níquel químico tiene una dureza muy elevada, de 500 a 1000 HV en función del tratamiento térmico realizado. Su dureza supera la de los aceros nitrurados. Por este motivo tiene una resistencia al desgaste adhesivo y abrasivo muy elevada.
Por lo tanto, en lo que respecta a la cesión de sustancia por desgaste mecánico, los recubrimientos de níquel tienen un comportamiento excelente. La elevada dureza y resistencia al desgaste hacen que, en muchísimas aplicaciones, la cesión de sustancia al alimento, según esta modalidad, sea insignificante.
También en este caso, el diseñador de la máquina debe evaluar las condiciones de trabajo de la pieza por recubrir.
Certificación NSF 51
Nuestros recubrimientos de níquel químico NIPLATE® 500, NIPLATE® 600 y NIPLATE® 500 PTFE están autorizados para el contacto con alimentos según la norma NSF 51. La normativa establece algunos requisitos mínimos de higiene y protección de los alimentos para los materiales utilizados en la construcción de maquinaria para la producción o transformación de alimentos. El cumplimiento de esta normativa no sustituye la necesidad de evaluar el cumplimiento legislativo por parte del comercializador que introduce el bien en el mercado.
Conclusiones
Dada la multiplicidad de variables en juego, no es posible para la empresa que realiza el tratamiento establecer a priori la conformidad del recubrimiento al contacto con alimentos específicos.
El fabricante del artículo que se niquela o que contiene una parte niquelada debe verificar que la cesión del níquel esté dentro de los límites establecidos por la normativa del país de referencia en el que se introduce, realizando eventuales pruebas de migración.
Para más información, consulte nuestra declaración D031 - Declaración para el uso de los recubrimientos en contacto con alimentos